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Primer ministro griego, Yorgos Papandreu |
La sorpresa precedió a la
irritación ante la propuesta del primer ministro griego, Yorgos Papandreu, de
plantear en referéndum la aceptación del plan
anti-crisis de la Unión Europea. Parece que nadie esperaba que
Grecia tuviese algo que decir sobre su propia economía, sin duda lo más lógico era
pensar que los dirigentes griegos agacharían la cabeza y el pueblo aguantaría
los recortes mientras los políticos europeos se hacen cargo de salvarles el
pellejo. Obviamente esto no ha sido así, y nadie debería sorprenderse por ello,
lo realmente sorprendente es el extraño comportamiento del primer ministro
Papandreu. La misma persona que alababa y se derretía en agradecimientos hacia
el plan de rescate diseñado por la cumbre europea, presentaba ayer su intención
de convocar un referendo para que sean los ciudadanos griegos los que decidan
si aceptan o no esta ayuda, ciudadanos a los que no había escuchado hasta ahora
mientras llevaba a cabo durísimos recortes públicos. ¿Qué ha llevado al líder
heleno a tomar esta decisión? Quizá quiera cubrirse las espaldas antes de
llevar a cabo los recortes
anti-crisis,
si el pueblo apoya el plan nadie podrá acusar a Papandreu de actuar en contra
de los intereses populares (claro que en cierto modo ya lo ha hecho). También
es muy posible que esto no sea más que una forma desesperada de retrasar lo
máximo posible la convocatoria de las elecciones anticipadas que la oposición
griega lleva tiempo reclamando. El primer ministro también anunció simultáneamente
que someterá la gestión de su gobierno al voto del Parlamento, teniendo en
cuenta que son 300 los diputados y 153 los fieles a la política de Papandreu,
no le será difícil conseguir los 151 votos a favor que necesita para
legitimizar su gobierno. Visto en conjunto parece que todo este revuelto no es
más que una consecuencia inevitable del plan de Yorgos Papandreu para reforzar
los apoyos de su gobierno en un momento en el que la crisis extrema las
tensiones entre el pueblo, sus gobernantes y sus oponentes políticos. Pero
claro, tan solo son conjeturas.
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